Escalera 2 - Cayejas 1

AL MAL TIEMPO BUENA CARA

Escalera gano un partido en un día lluvioso y una cancha empantanada muy difícil para jugar y terminó el sábado con una sonrisa enorme. Interesante actuación del equipo que generó no más de 8 situaciones de gol a un rival que peleaba arriba y suma un partido más a su seguidilla de buen juego. Destacados rendimientos individuales y la contundencia de un goleador: Matías Montironi facturó por duplicado y ya tiene 10 goles en el torneo.

Antes de empezar el partido pensábamos “la cancha en estas condiciones de mierda desfavorables perjudica o beneficia?” . El viernes había llovido BI EN, después había salido el sol y después vuelto a llover (?), por lo que uno anticipaba jugar con mucho, pero mucho barro. Y así fue, la cancha 3 safaba un poco más que las demás y la incógnita era ver a quien beneficiaba o perjudicaba.

Con el famoso “volumen de juego” en ascenso, pensábamos que la dificultad para pararse, arrancar, frenar y todo el resto de las acciones que incluye el fútbol y no son las del Santi, es decir, pegar y despejar, con extrema dificultad, el barro podía jugarle una mala pasada a Escalera. Pero de entrada nomás el equipo se empezó a sentir cómodo. Llegaba por derecha, por izquierda y encontraba algo de imaginación y tranquilidad para generar juego. En esos primeros minutos hubo un jugador que se destacó: Francisco Brusasca. Panchito parecía que jugaba en forbex, mientras que el resto lo hacían en un ring de lodo. La frenaba, se acomodaba, enganchaba y los defensores padecían su buen partido. Escalera empezó a llegar mucho y contó con varias chances: Iribarren, Montironi, Brusasca y hasta Gastardelli pudieron abrir el marcador y festejar haciendo el avioncito en el barro.

Se ahogaba el grito de gol en el barro y Escalera se iba al descanso con una sensación: el partido se podía ganar con total seguridad. La defensa había mostrado una interesante imagen y los centrales (Ripoll y Furst) y laterales (Cambursano y Montironi Gastón) tenían una buena tarde. Cayejas había llegado pero sin cambios y en una cancha pesada iba a tener que sacar amor propio y mucho suerte para ganar.

El segundo tiempo comenzó igual que había terminado el primero. Escalera iba e iba y Cayejas ya resignaba su juego a defender. Brusasca cansado le cedía el protagonismo a Matías Montironi. La figura de Escalera en el campeonato iba a demostrar en el barro su buen momento e iba a complicar constantemente por izquierda y después como delantero. No lo podían parar. Pero el juego se gestaba en las dos bandas y por el medio gracias a una excelente conducción de Ripoll. Sin el vértigo de Bertelli (durmió para pedir que lo busquen) pero con claridad para el último pase, el joven de Poeta Lugones ofreció un repertorio de asistencia para manejar bien la ofensiva de Escalera. Pase en cortado a Fabretti, desborde, centro atrás que deja (?) pasar Iribarren y Matías Montironi llegaba para meter el derechazo y fulminar a la figura de la cancha, el arquero de Cayejas.

Escalera mantuvo el buen nivel el último tramo del partido. De Pérez, recién ingresado, peleo una pelota perdida en la izquierda, forzó una contragolpe que iba a encontrar a Matías Montironi muy solo para definir con serenidad al primer palo. El 2 a 0 no hacía más que justificar el desarrollo del partido.

Cayejas llegó en los últimos minutos por la tradicional ley de los árbitros de beneficiar al equipo que va perdiendo. En este pasaje del partido se pudo ver la única falencia que se le puede criticar a Escalera. El equipo no manejo la pelota en los últimos metros y volvió a su costumbre de intentar terminar la jugada en 15 segundos cada vez que tenía la pelota. Cayejas invitaba al contragolpe pero también era momento de bajar la persiana, tener la pelota el tiempo necesario y obligar a Cayejas a hacer un esfuerzo titánico para recuperarla.

Al buen momento colectivo, el cual no es fruto de la casualidad sino a la intención de cada jugador de acoplarse a pautas grupales, se sumo esta vez un tremendo nivel individual. TODAS las piezas de Escalera jugaron en un muy buen nivel y eso se notó en la superioridad de Escalera sobre Cayejas. Finalmente, se suma un eslabón que se empapa de importancia por sí solo: El grupo humano. Primera vez que destacamos en el torneo el buen momento y la armonía que vive el equipo. Hasta ahora el balance es muy positivo, más que el torneo anterior ya que se llega a esta altura JUGANDO BIEN. A no relajarse y caer.